Ingeniero Comercial UC, con Master en Administración de Empresas de la UAI y Master en Desarrollo e Inversión Inmobiliaria del ESE, Peter Vanni lleva un poco más de 40 años en el rubro culinario, pero también ha dedicado parte de su vida a otras actividades propias de la profesión, como asesor de empresas, profesor universitario y también al desarrollo de otra marca gastronómica que aún perdura llamada Pagoda ( comida china en patios de comida).
– ¿Cómo ha sido su experiencia en Palacio Danubio Azul, que ha sido un negocio familiar hace muchos años?
-Sí, es una empresa familiar donde participaba mi madre (QEPD) hasta hace poco tiempo, y ahora seguimos con mi hermano Giovanni. Ha sido una experiencia de vida trabajar con mi familia, donde se ha ido disfrutando de los logros y aprendiendo de los errores y fracasos a través de los años, dando como resultado un trabajo comunitario mancomunado. Las lecciones que dan los años de trabajo y convivencia, solo hacen enriquecer más la experiencia laboral.
-¿Qué es lo que más disfruta de su trabajo en Palacio Danubio Azul?
-En lo personal lo que más disfruto del trabajo en Palacio Danubio Azul es poder desempeñarme en este local, donde he pasado el mayor tiempo de mi vida. Es el aportar al desarrollo del negocio, donde en todos estos años se ha debido renovar, reinventar, reestructurar para que sea más eficiente y eficaz la operación y se logren los resultados esperados.
– ¿Cuál es la estrategia del restaurante para mantenerse vigente en el tiempo?
-La estrategia ha sido tener y mantener una preocupación y presencia permanente en la operación diaria que sumado al grupo de colaboradores -algunos de ellos con más de 30 años en el negocio-, se logra tener una curva de aprendizaje óptima que igual se debe ir ajustando en el tiempo. Amén de ello, también han sido los viajes al exterior donde se traen nuevas ideas que después se adaptan a las posibilidades y realidad nacional…
– ¿Cómo ha sido para usted durante todo este tiempo liderar equipos de trabajo en el establecimiento?
-Ha sido una experiencia muy grata, porque al ser una empresa familiar donde las tareas se determinan y tienen carácter de comunión, se comparten, comunican, desarrollan y son llevadas adelante con todos los colaboradores de la empresa, ya que todos y cada uno juega un rol importante en la cadena de trabajo que permite dar un momento de calidad gastronómica y de servicio a nuestros clientes, que son nuestros comensales invitados.
– ¿Qué ha estado haciendo Palacio Danubio Azul para sobrellevar la pandemia?
–El inicio de la pandemia fue como para todos días muy difíciles. El trabajo lo dividimos con mi hermano Giovanni quien se contactó con las plataformas de delivery y hasta el día de hoy se sigue trabajando con ellos. Por mi parte, me tocó modificar, mejorar y adecuar toda la estructura de costos de la empresa para hacerla viable en el tiempo. Lo anterior sirvió para poder hacer mejor el trabajo cuando las autoridades permitieron la apertura y atención presencial en el restaurant. No puedo dejar de mencionar y agradecer a todos nuestros clientes por su preferencia y lealtad a la marca Palacio Danubio Azul…, sin ellos no hubiéramos sobrevivido a los difíciles y complicados días que se vivieron y que hoy, Dios mediante, pareciera que vamos saliendo.
– ¿Cuáles son los próximos retos del restaurante?
-Ufffff, esta empresa siempre tiene desafíos que se autoimpone o que por variables exógenas debe asumir. Sin embargo, por ahora diría que estamos Stand By. Ello porque como no se ha retornado a la total normalidad, sentimos que el mercado pareciera que no volverá a ser como antes de la pandemia, y por ende preferimos demorar por un tiempo las decisiones para disminuir riesgos de inversión o de nuevas formas de trabajo que vayan en directa relación a mejorar la experiencia de nuestros comensales invitados.