La Federación de Empresas de Turismo de Chile entregó sus galardones anuales bajo la mirada del Presidente Sebastián Piñera, el ministro Ignacio Valente y la subsecretaria Mónica Zalaquett. Vinolia se consagró como la empresa más innovadora.
La experiencia de recorrer los principales valles vitivinicolas del país desde el corazón de Santiago logró cautivar al jurado de la Federación de Empresas de Turismo de Chile, quienes ayer premiaron en Casa de Piedra a Vinolia como la empresa más innovadora de 2018. “Estamos felicies, pues este reconocimiento es un incentivo para todos aquellos que creen en la innovación”, dijo el director de Vinolia, Hernán Passalaqua, uno de los forjadores de este sueño, el que comenzó luego de recorrer polos mundiales del vino como Nueva Zelanda, Bordeaux y Napa Valley. “Aprendimos cómo en estos lugares se lograba que los visitantes experimentaran los sabores y aromas de sus mejores vinos reuniendo las prácticas más novedosas y atractivas en las ciudades”, dice Passlaquea.
Ubicado en el corazón de Vitacura, “el” primer centro turístico del vino urbano en Latinoamérica busca transportar a sus visitantes a los valles de Casablanca, Colchagua y Maipo a través de vuelo virtual en helicoptero proyectado en una gran pantalla. En español, portugués e inglés, estos videos explican las carácterísticas climáticas y geográficas de cada zona, mientras los enólogos de las viñas Loma Larga, Casas del Bosque, Bodegas RE, Morandé, Veramonte, Viu Manent, Montes, Koyle, Lapostolle y Los Vascos, Santa Rita, Cousiño Macul, El Principal, De Martino y Perez Cruz presentan sus vinos Premium y Gran Reserva. Sentados frente a una pantalla gigante, los asistentes catan estos vinos junto a una tabla de quesos y frutos secos.
Además, los visitantes recorren la “Sala de los Sentidos”, un ambiente que recrea los sonidos, aromas e imágenes que se experimentan cuando se visita un viñedo. Aquí hay muestras de 48 aromas asociados al vino; desde la canela y el arándano, hasta el chocolate y la pimienta; pasando por la miel y la menta.
“Nuestro público principal son los turistas nacionales e internacionales a los que les gusta el vino y saben de la calidad de las viñas chilenas, pero que no tienen tiempo para visitarlas. Logramos en 1 hora que nuestros turistas visiten un valle, 5 viñas, conozcan 5 enólogos y prueben 5 vinos. Anualmente, llegan a Chile más de dos millones de visitantes extranjeros, de los cuales 700 mil vienen por negocios y no alcanzan a salir de Santiago. Así mismo, muchas personas quieren introducirse en el mundo del vino por lo cual Vinolia es una gran solución. Vinolia está pensada para quienes buscan una experiencia única y de lujo”, explica Elisa Casanova, Gerente General del proyecto.
Además, este espacio, por encontrarse en pleno barrio de Alonso de Córdova y contar con el atractivo del vino chileno, también se ha usado para realizar eventos, seminarios y lanzamientos de productos.