Desde la viña familiar, ubicada en el valle de Curicó, publicaron estimaciones de la presente cosecha, calificándola como una temporada auspiciosa en términos de frescor, acideces y calidad para variedades en el norte de Chile.
El informe arroja marcadas diferencias en el comportamiento de viñedos del Norte y Sur, dada la influencia climática acontecida en ambas zonas, donde unos se vieron fuertemente afectados por la sequía, y los otros, tuvieron períodos más frescos sin olas de calor relevantes.
En la industria del vino, identificar el momento óptimo de la cosecha es crucial, tanto que para algunos es verdaderamente un arte. Una etapa muy esperada, donde se busca que la uva alcance su madurez ideal, determinando características sensoriales únicas que definirán el carácter del futuro vino. Para Miguel Torres Chile, la actual añada 2024, presentó ciertamente condiciones particulares, lo cual determinó el despliegue de un meticuloso trabajo para asegurar la calidad y excelencia que caracteriza a sus vinos.
Dicha labor en la reconocida bodega familiar, el proceso de vendimia se inició el pasado 2 de febrero en sus viñedos ubicados en el Norte de nuestro país, precisamente en el valle de Limarí con las uvas de la variedad chardonnay, las cuales son cultivadas en la zona de Talinay y que luego darán origen a su destacado vino Miguel Torres Cordillera chardonnay.
Estimaciones Zona Norte
Temporada que, entre sus principales características, presentó una fecha de maduración de las uvas 22 días más temprano que la añada anterior, un gran adelanto que se debe a “estaciones de primavera y verano cálidos, dando como resultado el desarrollo, madurez y acumulación de azúcares de forma anticipada a una temporada normal. Junto a esto, el Norte de Chile ha sufrido una gran sequía, con lo cual, las vides se han visto limitadas de manera importante con la disponibilidad de agua, traduciéndose además en rendimientos bastante bajos, llegando a ser incluso un 30% menos que la vendimia pasada”, señala Eduardo Jordán, director técnico y enólogo de Miguel Torres Chile.
Particularidades que, sin duda, exigieron un monitoreo temprano del proceso de final de madurez, para cosechar las uvas en el momento exacto y asegurar una calidad óptima, y “creemos que esta última será probablemente muy buena. Dado que ya iniciamos la fermentación, advertimos una acidez natural muy equilibrada, una marcada salinidad y gran estructura en boca. Otra posible excelente añada, proveniente de esta zona de Chile donde se producen los mejores chardonnays del país, debido a los suelos calcáreos, clima fresco y frío gracias a la cercanía de los viñedos con el Océano Pacífico”, agrega Jordán.
Proyecciones Zona Centro – Sur
Al contrario de lo sucedido en los viñedos nortinos, las etapas fenológicas del viñedo se presentaron más desfasadas, incluso hasta en 20 días, si se compara con la cosecha 2023. “Esto debido a que toda la estación primaveral fue más fresca, con buena disponibilidad y reservorio de agua en los suelos, esto por las grandes lluvias caídas durante el invierno y también en parte de la primavera, lo cual ha permitido un desarrollo lento de las uvas”, indica Eduardo Jordán.
Debido a la primavera fría y mayor humedad de los suelos, las estimaciones de rendimientos se han visto modificadas con casi un 10% menor que la estimación manejada en diciembre de 2023. “Esto generó racimos que se ven más sueltos y con menor cantidad de granos, lo que afectará su peso final y, por lo tanto, también los rendimientos finales, sobre todo, en tintas más sensibles como carmenere, malbec. Y en algunos casos, en blancas como sauvignon blanc y chardonnay”, asegura el director técnico y enólogo de Miguel Torres Chile.
Altas temperaturas e incendios forestales
En cuanto al verano en las zonas Centro y Sur, ha sido seco y con aumentos de temperatura, entre el período fines de enero y las dos primeras semanas de febrero de 2024, favoreciendo en gran medida a la propagación de grandes focos de incendios afectando a distintas regiones de Chile, donde ya sabemos, el área más afectada fue el valle de Casablanca en la Región de Valparaíso, donde se quemaron más de 30 mil hectáreas, mayormente bosques y alcanzando a casas habitacionales.
A la fecha no hay reporte de viñedos quemados, y el humo generado no afectará la calidad final de las uvas, especialmente de las tintas, ya que, durante los incendios, no habían alcanzado la etapa de pinta o veraison.
Contacto Miguel Torres Chile: