En la previa del día del vino chileno que se celebra el próximo 4 de septiembre, revelamos 2 buenas noticias para el mundo del turismo de vinos: el sello Fiestas de Vendimias Chile y el nuevo Manual de Buenas Prácticas.
Ma. Estela Girardin B. – Periodista y consultora @estela_girardin
Son 2 iniciativas lideradas por Enoturismo Chile pero que aplauden años de trabajo público-privado de CORFO, Sernatur, Subsecretaría de Turismo; INDAP, Marca Chile, Gobernación de Santiago (por su Fiesta de la Vendimia del Valle del Maipo); rutas del vino de Colchagua, Curicó y Casablanca; alcaldías de Portezuelo, Marchigüe, Santa Cruz, Curicó e Isla de Maipo; universidades como el Campus Colchagua de la Universidad de Talca y gremios del turismo como ACHET y FEDETUR.
La idea es que las fiestas que cumplan con al menos el 80% del Manual de Buenas Prácticas, obtengan el Sello. Y que nosotros, enoturistas entusiastas, las valoremos en aspectos como seguridad, sostenibilidad, pertinencia al territorio y a la identidad local.
Este es el sello que todos quieren (deben) tener
Se trata del sello Fiestas de Vendimias 2025, una iniciativa que reconoce a las organizaciones que han aplicado con éxito el Manual de Buenas Prácticas, elevando los estándares de calidad, seguridad y sostenibilidad en estas celebraciones, íconos del enoturismo chileno.
La primera “promoción” de fiestas de vendimia que obtuvieron este Sello está conformada por 8 fiestas: vendimia de Colchagua, Curicó, Valle de Casablanca, Valle del Maipo, Isla de Maipo, Portezuelo, Marchigüe y la Fiesta Universitaria del Campus Colchagua, las cuales cumplieron con más del 80% de los criterios del Manual de Buenas Prácticas y obtuvieron una evaluación positiva por parte del público asistente.





La ceremonia de entrega de los sellos se realizó el 14 de julio en el Palacio Pereira, ícono patrimonial del centro de Santiago. Fue también un momento para hacer memoria de cómo se llegó a esta instancia catalogada por Alicia Ortiz, gerenta de Enoturismo Chile, como una “muestra de madurez del enoturismo chileno” ya que es fruto de un trabajo de fomento de CORFO iniciado hace más de 20 años y propone nuevos estándares de calidad que apuntan a desarrollar y difundir una visión integral del vino chileno.
Marchigüe: un incendio y un punto de inflexión
El 9 de marzo del 2024 el tiempo se detuvo en la medialuna de Marchigüe, localidad del Valle de Colchagua que celebraba su XV fiesta de la vendimia. Todo normal hasta que un incendio postergó las celebraciones. Sin quererlo, este trágico episodio, que no involucró víctimas fatales, abrió el tema de la seguridad en este tipo de encuentros masivos. Un aspecto que está en el germen del sello y del manual de buenas prácticas de las fiestas de vendimia. Por eso, el alcalde de Marchihue Sebastián Flores, tuvo unas palabras especiales en el evento de lanzamiento del sello: «Para Marchigüe, recibir el Sello Vendimias Chile no es solo un reconocimiento, sino la confirmación de nuestro compromiso con fiestas de la vendimia seguras, familiares y con identidad. Después del incendio que afectó nuestra Vendimia 2024, este sello demuestra que aprendimos, nos fortalecimos y hoy miramos al futuro con más responsabilidad y orgullo que nunca. Queremos que nuestras vendimias sigan siendo espacios para compartir nuestra tradición, nuestra cultura y la esperanza de desarrollo para nuestros territorios”, indicó el alcalde.
Primer manual de buenas prácticas
Parte del orden que trae este manual, es que, por ejemplo, las fiestas de vendimia deben estar dedicadas al vino. Para otros alcoholes, otras fiestas. Tomando ese punto de referencia, el manual agrupa los estándares en 6 ámbitos que pasan revista a más de 30 criterios clasificados en obligatorios, básicos y deseables.
El objetivo es que este manual se transforme en una guía útil para los organizadores de estos eventos tales como: municipalidades, rutas del vino, expositores, organismos públicos y comunidades anfitrionas. Valga decir que este sello debe renovarse cada año y que, bajo un sentido de mejora continua, será actualizado según observaciones de las organizaciones y aportes de los visitantes.
Más allá de la estacionalidad de las vendimias: ya sabemos cómo se recarga el calendario entre fines de febrero y mayo, el sello Fiestas de Vendimia Chile apunta a elevar el nivel del turismo chileno asociado al vino. Que las fiestas de la vendimia sean vitrinas de una oferta turística más integrada a cada valle y ciudad: desde lo gastronómico; artesanal, productivo e incluso desde lo antropológico por su contribución a la identidad y orgullo regional – nacional. Fiestas capaces de extender la temporada alta y atraer nuevos visitantes. Porque como señaló Verónica Pardo, subsecretaria de Turismo: “es imposible que al lado de un buen vino, haya mala gastronomía. Por algo somos el 4to exportador mundial de vino. Como chilenos, solo nos falta creernos el cuento”.
Aquí puedes descargar el Manual de Buenas Prácticas