- El reciente director nacional de Sernatur enfatizó que este reto es una tarea que implica muchos factores, como mejorar la conectividad, no solo a través de Santiago, sino en las distintas ciudades del país, donde es clave también fortalecer el trabajo público-privado en cada uno de los destinos, así como con los gobiernos locales, para generar una buena gestión que ayude a llevar adelante los desafíos que involucran inversión en infraestructura y planificación de los destinos.
- Como balance turístico, entre diciembre de 2022 y febrero de este año, a nivel de llegadas de turistas internacionales, Benítez resaltó que se recibió a 1.219.670, que es un 475% más que en el mismo periodo de 2021-2022 y que significa una recuperación de 75,3% comparado con el de 2019, antes de la pandemia.
Por Daniela Salvador Elías
Hace unos meses fue elegido Cristóbal Benítez como director nacional de Sernatur, un gran reto para una persona altamente preparada en este ámbito, que cuenta con gran conocimiento de la industria turística.
Cristóbal es administrador de empresas de turismo de profesión y magíster en Gestión Sustentable de Destinos y Productos Turísticos, con más de 15 años de experiencia en el sector público y privado.
En entrevista con Revista Canal Horeca, quisimos indagar sobre sus planes en este nuevo cargo para fortalecer el turismo tanto en Chile como a nivel internacional; el desafío del desarrollo sustentable en la actividad turística; la evolución del turismo receptivo y sobre la relación de la gastronomía y el turismo a modo de potenciar nuestra cultura, entre otros temas.
– ¿Qué le parece su nueva designación como director nacional de Sernatur?
-Es un tremendo desafío que asumo y lo hago con responsabilidad y un total compromiso con el sector. Es una oportunidad también sobre todo por el momento en que está el país y el mundo, en general. Luego de los impactos que evidenciamos por la pandemia, uno de los más urgentes desafíos que tenemos es la recuperación de la promoción internacional y los principales mercados que viajan hacia Chile. Esta es una tarea que implica muchos factores, como mejorar la conectividad, no solo a través de Santiago, sino en las distintas ciudades del país.
El trabajo en los territorios también es una prioridad. Estamos en un proceso de descentralización a nivel nacional, por lo tanto, es necesario reforzar que la actividad turística se desarrolle en las regiones. Para nosotros, es clave también fortalecer el trabajo público-privado en cada uno de los destinos, así como con los gobiernos locales, para generar una buena gestión que ayude a llevar adelante los desafíos que involucran inversión en infraestructura y planificación de los destinos, además de propiciar la coordinación con otras entidades. De esta manera, podremos mejorar la competitividad de los servicios a través de la colaboración que se puede hacer con instrumentos de fomento y los gremios privados.
-Usted posee amplio conocimiento en el rubro del turismo, con más de 15 años en el sector público y privado y con amplio foco en sustentabilidad. ¿Dentro de sus desafíos, continuará fortaleciendo la sustentabilidad en la industria, además de lograr que el turismo se asuma como una política de Estado?
-Para el turismo, la sustentabilidad tiene que ser transversal y debe partir desde el origen de las iniciativas que desarrollemos con la Estrategia Nacional de Turismo Descentralizada a 2035. Allí es donde estarán definidas las principales acciones para el sector durante los próximos años.
Abordaremos este desafío del desarrollo sustentable en la actividad turística en cada una de sus dimensiones: medioambiental, económica, social y cultural, abordando la planificación desde una mirada territorial e involucrando al mundo empresarial y a todos quienes conforman la cadena turística, con lo que esperamos ser un aporte para las comunidades locales.
Por esta razón, se creó en 2010 el Comité de Ministros del Turismo, que es el sistema institucional que tenemos para aportar al desarrollo del turismo y que tiene como función asesorar al Presidente de la República en la fijación de los lineamientos de la política gubernamental para el desarrollo de la actividad turística.
Esta instancia, además, nos permite hacer que la mirada turística se refuerce en cada uno de estos ministerios, es decir, en Obras Públicas, en Vivienda y Urbanismo, en Agricultura, en Bienes Nacionales, en Medio Ambiente y en Culturas, las Artes y el Patrimonio, con el fin de que las variables turísticas estén incorporadas dentro de su planificación y que el turismo sea transversal al funcionamiento del Estado.
Asimismo, estamos trabajando en la construcción de un plan a largo plazo, que se materializará con la Estrategia Nacional de Turismo Descentralizada, en la cual estarán definidas las principales acciones para el sector hacia el año 2035. En ella, especial énfasis tendrán las regiones, de ahí el apellido de descentralizada, porque debemos fortalecer el trabajo en los territorios y la gestión de los destinos turísticos, tanto los consolidados como los emergentes y los potenciales.
Otro de los pilares fundamentales de esta estrategia es la promoción internacional. En nuestro plan de marketing internacional buscamos recuperar aquellos mercados emisores prioritarios para el país, a través del fortalecimiento de la cadena de comercialización y también con diferentes acciones que puedan recuperar estos destinos de la mano de la conectividad del país. Sabemos que la conectividad será uno de los temas clave en el desarrollo de la industria durante los próximos años, por lo tanto, estamos trabajando en una estrategia de promoción internacional que vaya de la mano con las principales rutas de conexión a Chile.
-¿Cuál será su plan de trabajo para enfrentar el duro escenario que ha vivido el turismo por la pandemia, donde si bien ha mejorado aún se necesita restablecer la competitividad perdida, sobre todo por la alta inflación que se está viviendo?
-Sin lugar a dudas, el turismo ha sido una industria muy golpeada, tenemos muchas pymes con un nivel de endeudamiento mayor al que tenían y, por lo mismo, existe un nivel de urgencia por recuperar la actividad turística en el corto plazo, como también, las cifras de empleabilidad que acostumbraba a brindar este sector.
Algunas de las herramientas en materia de apoyo a la competitividad empresarial que hemos desarrollado o apoyado desde Sernatur son algunas distinciones para las empresas que están haciendo bien su trabajo —como el Sello Q de Calidad Turística, el Sello S de Sustentabilidad y el Certificado de Compromiso de Sustentabilidad—, la plataforma Aprende Turismo, que reúne en un solo lugar cursos y herramientas online para impulsar el nuevo turismo —algunas de ellas son los programas SIGO, cursos de sustentabilidad, hospitalidad y accesibilidad o los de metodología Market Ready, la Ruta Digital de Sercotec o el plan formativo para guías de turismo—, acciones en favor del capital humano —Certificación de Competencias Laborales, Catálogo de Carreras asociadas al turismo, cursos de Sence y subsidios al empleo joven y femenino— y algunas iniciativas que impulsan la innovación —los concursos Más Valor Turístico y Mujer Empresaria Turística, las competencias de startups y programas de fomento de Sercotec y Corfo—.
Parte del trabajo es avanzar en la promoción para recuperar el turismo receptivo. El turismo nacional se ha ido recuperando, sin embargo, necesitamos reforzar el trabajo con el turismo receptivo y la promoción internacional, muy de la mano con la conectividad. Hoy, la conectividad a nivel mundial está mucho más limitada, tenemos menos frecuencias de vuelos, por lo que debemos ser estratégicos en definir cuáles son los mercados con los que vamos a trabajar como principales emisores y dónde estará nuestro esfuerzo con el fin de recuperar la cadena de comercialización que hoy está debilitada. La pandemia, por ejemplo, implicó que mucha fuerza de venta que vendía Chile, hoy no la tenemos. Y ahí debemos hacer un trabajo que implica recuperar esos turistas internacionales que son quienes aportan e impactan en la economía.
Creo que la clave está en cómo sacamos a relucir la diversidad de atractivos con que cuenta el país en la promoción que hagamos, ya que tenemos recursos infinitos, numerosas experiencias y hemos sido reconocidos en el mundo por ello.
-¿Cómo evalúa la reciente temporada estival, que tuvo más presencia de turismo receptivo a comparación del 2022, donde hubo recuperación del turismo interno?
-Hemos visto avances respecto al último periodo estival. Como balance, entre diciembre de 2022 y febrero de este año, a nivel de llegadas de turistas internacionales, hemos recibido a 1.219.670, que es un 475% más que en el mismo periodo de 2021-2022 y que significa una recuperación de 75,3% comparado con el de 2019, antes de la pandemia.
Respecto a los ingresos, esto es US$682,7 millones, es decir, 517% más que en 2022 y una recuperación de 74,2% respecto a 2019.
Debemos tener en cuenta que nuestra proyección de la temporada estival considera un total de llegadas de turistas internacionales de 1.551.667, entre diciembre y marzo, por lo tanto, esperamos que esas cifras sigan en aumento.
A nivel interno, llevamos 22.337.945 viajes con pernoctación, lo que es un 4,2% superior a 2022 y 2,4% más respecto a 2019. De todos modos, hay que considerar que la temporada estival aún no ha terminado y esperamos alargarla un tiempo más, porque hay regiones que se han visto muy afectadas por los incendios forestales y, desde luego, empresas de turismo, para las que estamos evaluando algunas herramientas y medidas de apoyo, como propiciar acciones de promoción y de impulso de nuestros programas sociales, con el fin de reactivar los destinos.
¿Cómo ve la imagen país que ha construido nuestro país a lo largo de los años?
-No es secreto para nadie que Chile tiene mucho que mostrar en materia turística. En los últimos años, el país ha ganado fama mundial por sus atractivos y destinos más emblemáticos y nos hemos convertido en un país referente en cuanto a naturaleza, turismo aventura y todas las experiencias que se pueden vivir al aire libre.
Las cifras también dan cuenta de esto: el 63,2% de las personas que llega al país lo hace motivado por nuestra naturaleza, los paisajes y la flora y fauna (cifra de 2019, año de referencia antes de la pandemia).
Prueba de ello es que hemos recibido en múltiples ocasiones reconocimientos por parte de los World Travel Awards y TripAdvisor, por ejemplo, y hemos sido parte de listas de destinos destacados por publicaciones de National Geographic y Lonely Planet, por nombrar algunas.
Todo esto va de la mano de una fuerte promoción y del desarrollo de una oferta turística acorde a las tendencias que hemos vivido, sobre todo luego de que en medio de la pandemia aprendiéramos a valorar mucho las actividades asociadas a la naturaleza.
Y lo cierto es que en este aspecto tenemos mucho potencial, gracias a la diversidad de paisajes, climas, experiencias y la extensión de nuestro territorio, por lo tanto, claramente nos hemos convertido en un referente turístico en nuestra región y también en el mundo.
-¿Cómo ve la relación de gastronomía y turismo que se ha trabajado con comunidades locales, además de proyectos de regiones, entre otros, con objeto de atraer tanto a un público nacional como internacional, para darles a conocer nuestra cultura?
-La comida es parte de nuestra identidad. Por eso, para nosotros, el área de la gastronomía es muy valiosa porque es una parte integral de las experiencias que podemos ofrecer como país y, además, posee un amplio potencial para agregar valor.
A su vez, las trabajadoras y los trabajadores que conforman el capital humano de este segmento concentran los conocimientos y las habilidades necesarias para brindar experiencias con calidad y hospitalidad.
Junto a la Subsecretaría de Turismo, hemos elaborado algunos lineamientos estratégicos para impulsar el turismo gastronómico, a fin de posicionar a Chile en el mapa gastronómico de Sudamérica al año 2030 y, de esta manera, atraer visitantes motivados por la diversidad de experiencias culinarias innovadoras.
Para esta estrategia, es imperativo desarrollar un programa nacional que ponga en valor la riqueza y la diversidad de los elementos locales y regionales de patrimonio y cultura gastronómica, por eso, en conjunto con Transforma Turismo, hemos conformado un comité gestor de turismo gastronómico que ha propiciado la articulación de los actores clave vinculados a la industria del turismo y la gastronomía para identificar iniciativas que apunten al cumplimiento de una hoja de ruta que trabajaremos durante este año.
Respecto al trabajo que hemos hecho con las comunidades y las regiones, destacan el Club de Gastronomía Tradicional (2021), vinculado a la enogastronomía, el cual contó con 53 beneficiarios, entre productores locales, restaurantes de la zona, alojamientos, guías y operadores de las regiones de Valparaíso, Metropolitana y O’Higgins. Su pilotaje permitió diversificar la oferta turística a través de la creación y comercialización de experiencias que rescatan el patrimonio gastronómico de los territorios intervenidos, especialmente en el Cachapoal, Región de O’Higgins.
También el Club de Gastronomía del Pacífico Austral (2021-2022), vinculado a caletas pesqueras de Tongoy (Región de Coquimbo), Pichilemu (Región de O’Higgins) y Los Molinos, (Región de Los Ríos), a través del cual se realizó la identificación y el diseño de la carta asociada a los productos identitarios de cada caleta y el desarrollo del relato nacional para la gastronomía marina.
Y, finalmente, el Club de Gastronomía de Pueblos Indígenas (2022), vinculado a la comida mapuche, que permitirá articular a productores locales con los restoranes de la zona y los operadores, a fin de diversificar la oferta turística a través de la creación y comercialización de experiencias que rescaten el patrimonio gastronómico de los territorios.