Además de restaurante, cuentan con su propio centro de producción, donde elaboran sus masas; también preparan sus helados; asimismo cuenta con un mercadito con productos propios y otros importados y además es una enoteca, la que cuenta con los exclusivos vinos de Viña Gandolini, Ventolera y von Siebenthal.
Por Carlos Montoya Ramos
Los amantes de Italia y su cultura ahora tendrán un nuevo espacio para disfrutar de la mejor gastronomía italiana, todo en una atmósfera cálida y un ambiente familiar, la Bottega Gandolini.
En funcionamiento desde diciembre, la Bottega Gandolini es la clara expresión de un proyecto gastronómico construido en familia, y en el que se espera con calma a que todo, productos, preparaciones, e ideas, reposen el tiempo que necesiten hasta alcanzar la maduración ideal.
Alfonso Silva Gandolini, uno de los fundadores de la Bottega Gandolini, relata que “todo comenzó con un sueño, una idea de niños. Partimos hace 8 años como un emprendimiento entre los hermanos haciendo pizzas en un carrito, ¡en todos los lugares que nos llamaban! fue una linda etapa universitaria, en la que nos dedicamos a perfeccionar nuestra receta de la masa, la mezcla de los ingredientes, a probar nuevos proveedores y a desarrollar nuestros propios productos”.
Sin embargo, comenzó la pandemia y se acabaron los eventos, pero no la motivación por crear su propio restaurante, hasta que apareció la oportunidad.
“Seguimos nuestra intuición, y encontramos este lugar que nos permite desarrollar lo que queremos (Alonso de Córdova, casi esquina Vitacura). Somos cinco hermanos y cada uno aporta con su trabajo y experiencia. Producimos todo lo que se encuentra en nuestro local y atendemos nosotros mismos, porque queremos darles la mejor hospitalidad italiana, y la mejor atención a cada uno que cruce la puerta. Recién abrimos hace dos meses y ha sido una experiencia gratificante, de mucho trabajo y esperamos seguir mejorando”, comenta Alfonso.
Cultura, arte y gastronomía en una misma preparación
- La Bottega Gandolini no es un restaurante común. Es un centro de producción, donde elaboran sus masas para pizzas, focaccias y pastas; también preparan sus propios helados; asimismo cuenta con un mercadito con productos propios y otros importados desde Italia, como quesos y charcutería; también es una enoteca, donde se pueden degustar los exclusivos vinos del destacado enólogo y parte de la familia, Stefano Gandolini, como GANDOLINI Las3Marías de Viña Gandolini, o diversas etiquetas de Viña Ventolera.
“Para las pizzas, la receta de la masa es propia, elaborado con grano italiano, leudada por más de 24 horas y combinadas con productos de la casa, como salsa de tomate San Marzano y aceite de oliva Gandolini, producidos por nosotros mismos; y algunos productos de nuestra propia huerta, como albahaca y rúcula. También otros los importamos de cada región Italiana, como Mozzarella della Campania, il Prosicutto di Parma, la Mortadella di Bologna, entre muchos otros”, explica Alfonso.
Solo por mencionar algunas, destaca la Bianca, con Burrata di Puglia, toques di «or di la!e, alcachofas al aceite de oliva Gandolini, tomate cherry y albahaca de la huerta; o la Gorgonzola, con salsa de tomate de la casa, «or di La!e, queso Gorgonzola, tomate deshidratado, rúcula fresca y aceite de oliva Gandolini.
En este lugar funcionarán varias formatos. Una cafetería en las mañanas, hasta las 18 horas, en la que ya están trabajando para hacer su propio café; para la hora de almuerzo habrá pizza al paso, con paninos, focaccias, y después está la pizzería con demás platos y, luego de a poco ir incorporando las pastas. Después destinarán un espacio para realizar eventos de diversos formatos, corporativos, familiares, celebraciones, hasta encuentros artísticos. Actualmente tienen una capacidad de hasta 120 personas, aunque pueden ir habilitando diversos espacios dependiendo del número de comensales.
Para el fundador de la Bottega Gandolini, “la idea es que todos los productos sean siempre frescos, y que todo esté preparado y servido de la forma en que podamos sacar lo mejor. Por ejemplo, para los vinos, tenemos copas especiales para cada cepa, para destacar los aromas, y cada copa potencia al máximo la cepa”.
La Bottega, un espacio para transmitir conocimiento
En el Renacimiento, la Bottega era el lugar donde el maestro le enseñaba su oficio y transmitía su experiencia al aprendiz. Con esta idea en mente, Alfonso Silva Gandolini sostiene que la idea es que en la Bottega Gandolini se comparta el conocimiento que han desarrollado a todos quienes quieran conocerlo.
“Haremos diversos talleres, como clases de vino, con salidas a la viña y que Stefano pueda explicar todo el proceso, será algo formativo; también realizaremos talleres de pastas, de las pizzas, de aprender la importancia del agua, las harinas, en fin, todo lo que tenga que ver con nuestro rubro”.
De esta manera, Alfonso Silva reconoce que la Bottega Gandolini se convertirá en un lugar de encuentro de oficios culinarios, “donde la harina y las masas son nuestras protagonistas. Cada día amasamos harina y agua, ingredientes tan simples, que nos hacen recordar la simpleza de la vida misma, amasar con fuerza, esperar a que fermente, esperar que dialoguen los ingredientes para dar con nuestra exquisita pizza”.
Actualmente la Bottega Gandolini se encuentra en marcha blanca hasta marzo, lo que significa que su carta irá en creciendo, como con la incorporación de pastas de la casa los lunes y otras novedades. Su horario de atención es de lunes a viernes, desde las 13 hasta las 00 hrs.
“En enero entrarán algunas cosas al mercadito, con los helados, comenzarán los primeros talleres y las visitas a las viñas, algunos talleres acá y algunos eventos que desde ya se pueden realizar. En definitiva, sabemos que nos queda camino por recorrer para seguir nuestro sueño. Al final, la pizza es un medio, la finalidad es la alegría del compartir, del recibirlos y que cada cliente se vaya contento y con nuevos aires para disfrutar la vida, y crear sus propios sueños”, concluye Alfonso.
la Bottega Gandolini
bio.site/labottega_gandolini
contacto@labottegagandolini.cl
Av. Alonso de Córdova 2335